Comencemos con la escultura clásica de fase severa, pero la de tipo templaria/religiosa (como la que había decorando los frontones de templos griegos). La escultura exenta o libre de temas variados la dejaremos para la próxima entrada.
Las esculturas clásicas severas pueden parecer simples pero nunca van a caer en la inorganicidad del arcaísmo. El escultor va a aprender todo sobre la anatomía (huesos, músculos...) y se va a conseguir alcanzar un canon de belleza ideal. Las distintas partes del cuerpo van a estar cohesionadas.
Otra característica va a ser la serenidad de lo clásico, es decir, no hace falta que las figuras rían o lloren (por ejemplo como ya veremos la escultura del Discóbolo está en tensión pero su cara no expresa sentimientos). Los sentimientos o defectos humanos aparecerán en el helenismo (posterior a la época clásica).
El escultor griego va a buscar una figura humana lo más real posible, para ello la escultura estará hecha a base de números (se calcula y se estudia, además que se mide antes de tallar), con todas las partes relacionadas proporcionalmente entre sí (dedos entre sí, brazos entre sí...). En resumen que es un escultura muy pensada y meditada. ¿Cuáles son las características de la escultura severa? Estas:
- Composición tranquila, ritmo pausado.
- Formas cerradas, las figuras se pliegan sobre sí mismas, al contrario que en época helenística como ya veremos en su momento, con extremidades muy despegadas del cuerpo y posturas muy extravagantes.
- Talla cuidada, realizada mediante cincel plano, se van a conseguir zonas muy lisas en la superficie de la escultura (como por ejemplo pectorales).
- Simplicidad en el vestido y peinado que llevarán las figuras.
- Seriedad en el rostro, se borra la sonrisa arcaica.
Después de señalar las principales características de la escultura severa vamos a hacer visible todo esto a través de ejemplos. Lo primero que vamos a ver relativo a la escultura severa templaria son las estatuas de los frontones del templo de Aphaia o Afaya en Egina. En ambos frontones se observa una misma temática estatuaria: los héroes eginetas que lucharon en la batalla de Troya. Según la mitología dos veces participaron o lucharon los eginetas en Troya, la primera ocasión en fechas muy remotas, la segunda ocasión lucharon en la propia guerra de Troya. Por la presencia de la figura de Herakles en las esculturas se piensa que la temática hace referencia a esta primera vez que los eginetas lucharon en Troya.
Lo curioso de estos frontones es que nos permiten ver una evolución de la escultura de final del arcaísmo a principios del período severo, ya que aunque los dos frontones originales se esculpieron en el 510-500 a.C., el frontón oriental se rompió debido quizás a un movimiento de tierras que hizo pedazos las esculturas. A razón de esto el frontón oriental se volvió a esculpir pero ya en el 490 a.C., ya dentro de la fase severa. Se observan entonces:
- Un frontón viejo u occidental fechado en el 510-500 a.C., en el cual las esculturas que se conservan portan la sonrisa arcaica, formas y posturas forzadas...etc. En el centro de este frontón se encontraba la diosa Aphaia, además había otras figuras como un arquero troyano (reconocido por el gorro que porta), un guerrero herido con pelo y sonrisa arcaica...etc. A pesar de estar metido en el período arcaico final las figuras ya tienen movimiento: torsión de caderas, piernas cruzadas en el caso del soldado herido, posturas difíciles...etc.
- Un frontón nuevo u oriental, fechado en el 490 a.C., caracterizado por mayor unidad e detalles y una composición casi perfecta. Es similar al anterior frontón ya que también está Aphaia, guerreros heridos, arqueros...etc. Las figuras son de mayor calidad, tienen más movimiento, anatómicamente más perfectas...etc. Ejemplo de todo esto es la escultura de Herakles lanzando una flecha, sin arcaísmo, con el leontés en la cabeza (piel de león), con la musculatura marcada perfectamente. Tan solo encontramos atisbos residuales arcaicos en una leve sonrisa que tiene el soldado herido y en la barba de esta misma escultura.
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Frontones del Templo de Aphaia. El de arriba es el oriental, el de abajo el occidental
(Autor foto: Cédric Boissière. Fuente: wikipedia)
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Dejamos los frontones del templo de Aphaia para ver otros frontones: los del templo de Zeus en la ciudad de Olimpia.
Primero vamos a explicar el fronton oeste (occidental), que data del 456 a.C. En el hay representada una escena de centauromaquia en un mito conocido como la boda de Piritoo con Hipodamia. Según este mito unos centauros fueron invitados a la boda de unos líderes lapitas: Piritoo con la bella Hipodamia. Aunque según la mitología los centauros son pacíficos y bondadosos, si beben vino enloquecen y aflora su parte animal. En la celebración de la boda, tras emborracharse, los centauros tratan de violar a la novia y raptar a las invitadas. Los lapitas salen a defender a las mujeres y se forma una batalla, de la cual salen victoriosos los lapitas.
En el centro de este frontón está Apolo, a su derecha Teseo, a la izquierda se encuentra Piritoo atacando a Euritión (rey de los centauros) que quiere raptar a la novia. Frontón en movimiento, composición dinámica, escenas cerradas, pliegues muy generosos...etc. Las estatuas son esculturas exentas (no alto-relieves como alguien puede pensar).
El otro frontón es el oriental. En él se representa la carrera de carros entre Pelops y Enomao. Enomao era rey de Pisa en Olimpia. Él es el padre de Hipodamia (la novia de la boda). Hipodamia quería casarse pero su padre no la dejaba. Su padre retaba a cada pretendiente de su hija a una carrera de carros, si el pretendiente ganaba se casaría, si perdía sería ejecutado. Enomao hacía trampa ya que sus caballos eran mágicos y siempre ganaba, por lo que muchos pretendientes fueron ejecutados. Pero llegó Pelops, a quién el dios Poseidón le dio unos caballos sagrados imbatibles como regalo, ya que fueron amantes. Pelops consiguió ganar y el conseguir el derecho a casarse con Hipodamia. Otra versión del mito dice que Pelops sobornó al auriga de Enomao, por lo que el auriga cambió los ejes del carro por otros de cera los cuales se fracturaron en mitad de la carrera. Luego Pelops no cumplió su promesa de pagar al auriga, por lo que el auriga maldijo a Pelops y todos sus descendientes (lo cual da lugar a otro mito).
El frontón es de composición cerrada, transmiten (las esculturas) la sensación de tensión que precede a la carrera de caballos. Las dos personas representadas en las estatuas de los extremos representan los ríos de la ciudad. Los pliegues de las vestimentas de las figuras son excepcionales.
Primero vamos a explicar el fronton oeste (occidental), que data del 456 a.C. En el hay representada una escena de centauromaquia en un mito conocido como la boda de Piritoo con Hipodamia. Según este mito unos centauros fueron invitados a la boda de unos líderes lapitas: Piritoo con la bella Hipodamia. Aunque según la mitología los centauros son pacíficos y bondadosos, si beben vino enloquecen y aflora su parte animal. En la celebración de la boda, tras emborracharse, los centauros tratan de violar a la novia y raptar a las invitadas. Los lapitas salen a defender a las mujeres y se forma una batalla, de la cual salen victoriosos los lapitas.
En el centro de este frontón está Apolo, a su derecha Teseo, a la izquierda se encuentra Piritoo atacando a Euritión (rey de los centauros) que quiere raptar a la novia. Frontón en movimiento, composición dinámica, escenas cerradas, pliegues muy generosos...etc. Las estatuas son esculturas exentas (no alto-relieves como alguien puede pensar).
Frontón oeste, la centauromaquia. Apolo es la figura que mejor se conserva (Autor foto: Angela Monika Arnold Fuente: wikipedia) This file is licensed under the Creative Commons Attribution 3.0 Unported license. |
El frontón es de composición cerrada, transmiten (las esculturas) la sensación de tensión que precede a la carrera de caballos. Las dos personas representadas en las estatuas de los extremos representan los ríos de la ciudad. Los pliegues de las vestimentas de las figuras son excepcionales.
El templo también tenía metopas las cuales en la actualidad se conservan muy mal. Eran 12 metopas, 6 en la pronaos y otras seis en el opistodomos. Miden 1,6 x 1,5 metros. En ellas están representados los trabajos de Herakles. El artista ha querido resaltar la parte humana de dicho personaje a través de las emociones: fatiga, orgullo, concentración...). Tiene muy buen modelado. En las metopas prima la composición triangular, aunque también en alguna de ellas hay composición vertical. Una de las metopas es especialmente curiosa, se trata del trabajo de las "Manzanas de las Hespérides". Las Hespérides eran las Islas Canarias, que era el último territorio conocido en la antigüedad, del sur. Esta es la metopa número XI, en este trabajo Herakles tenía que buscar las manzanas de oro de las Hespérides, para lo que Atlas (un gigantes) tenía que ayudarle. Atlas sostenía el mundo en sus espaldas, puesto que ocupó Herakles mientras Atlas encontraba las manzanas y se las entregaba. Herakles tuvo que ser ayudado por Atenea puesto que él no tenía tanta fuerza como Atlas. Pero Atlas una vez librado del peso no quería volver a sostener el mundo. Herakles tuvo que engañarlo diciéndole que él se quedaría allí para siempre, pero que sostuviese el mundo cinco minutos más mientras él se ponía un almohadilla para serle más cómodo. En ese momento que Atlas cogió de nuevo el mundo, Herakles aprovechó para irse de allí.
Para ver unos dibujos de cómo serían las metopas haz clic AQUÍ.
Para ver unos dibujos de cómo serían las metopas haz clic AQUÍ.
También hay metopas en otros templos o edificios, como es el caso de las metopas del Tesoro de los Atenienses en Delfos. En las metopas de este tesoro están representadas las aventuras de Teseo y Hércules (Herakles). Es la transición de época arcaica a clásica, ya que hay mucha variedad en cuanto a ejecución, seguramente no fueron hechas en el mismo año, y con un 100% de seguridad, no fueron hechas por la misma persona. Algunas son tan arcaicas que son korai y kouroi los representados, otras son de mayor calidad como en la que muestra a Herakles luchando contra un centauro, llevando puesta la piel del león de Nemea (haz clic AQUÍ para ver esta metopa).
Por último decir que en la Magna Grecia también tenemos metopas de transición entre un período y otro, pero es una transición más anclada en el arcaísmo (a pesar de que cronológicamente estamos en la fase severa de época clásica). Esto es símbolo del atraso que sufrían en la Magna Grecia en estos momentos en cuanto a reproducción artística y arquitectura. Ejemplo de ello lo vemos en una metopa de un templo de Hera en Selinunte, metopa realizada sobre una placa de caliza, donde vemos a Artemisa con Acteón, siendo este último devorado por sus propios perros a orden de Artemisa.
Metopa conocida como Artemisa y Acteón. Autor foto: G.dallorto. Fuente: wikipedia.
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Aquí terminamos la entrada. La próxima sobre escultura exenta de la fase severa del período clásico.
¡Feliz Lunes! - Hacer historia, aprehender la historia, aprendes la historia
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